EL MAPA DE LA COVID-19 - POR: JOSÉ CONSUEGRA

Un simple estornudo o una tos ocasional nos llenan de preocupación y nos ponen los pelos de punta ante la posibilidad de contagio de Covid-19. Igualmente, al salir a la calle nos inquieta entrar en contacto con personas que, sin tener síntomas, sean portadoras del virus. De hecho, no es raro que durante este tiempo de pandemia nos preguntemos con frecuencia si nosotros o las personas con quienes compartimos han estado enfermas o lo han padecido de manera asintomática, sin haber tenido un diagnóstico de certeza.

Por ello, y ante el riesgo real de un rebrote de Covid-19 en Colombia, es fundamental implementar las estrategias y acciones de salud pública contra la propagación del virus, minimizando su impacto en la población. El estudio de seroprevalencia liderado por el Instituto Nacional de Salud (INS), con una cobertura de 10.400 muestras que son tomadas en Barranquilla, Leticia, Medellín, Bogotá, Cúcuta, Cali, Bucaramanga y Villavicencio, es una herramienta importante para trazar la ruta sanitaria a seguir en el país en la lucha contra la pandemia. Lo que espera el INS es contar con datos para comprender cómo ha sido el comportamiento del virus SARS-Cov2 en nuestro territorio.

La Revista Española de Salud Pública (2009) define que los estudios de seroprevalencia permiten conocer la circulación pasada o actual de un agente patógeno en una comunidad, así como determinar las poblaciones de riesgo para una enfermedad, evaluar los mecanismos de transmisión, determinar los grupos de población críticos para mantener la transmisión, al igual que adecuar las medidas de control y proponer soluciones.

La Covid-19 es sumamente diversa en su evolución clínica: algunas personas solo padecen síntomas leves, otras pueden requerir hospitalización y terapia de oxígeno, buena parte son asintomáticas y una minoría se complica y puede morir por sus efectos. La población que no presenta síntomas no acude a las entidades autorizadas para la toma y realización de la prueba, por lo que no es claro cuántas personas en el país han estado infectadas y cursado de forma no clínica esta enfermedad. El estudio de seroprevalencia permitirá calcular cuántas personas realmente han estado infectadas, midiendo, con precisión, si alguien estuvo expuesto o no al virus, aunque no hubiese contado con un diagnóstico anterior.

Una conclusión importante del estudio de seroprevalencia realizado en España arrojó, en julio, que el 5,2 por ciento de la población española había superado la enfermedad, pero también, en su momento, se pidió prudencia a la población pues fueron detectadas algunas personas que, aunque la padecieron, ya no presentaban anticuerpos.

Mientras esperamos el advenimiento de un medio de inmunización idóneo es imprescindible que la ciencia avance en la configuración del mapa epidemiológico completo del virus, de manera que las autoridades de salud de los países puedan dar pasos seguros para contenerlo y limitar sus efectos. Como comunidad debemos actuar con responsabilidad para coadyuvar en el control de esta devastadora pandemia.

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