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A las 9:00 a.m., la Gobernación de Norte de Santander, a través de la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres, activó la alarma del Centro de Gestión Integral del Riesgo de Desastres Fronterizo – CEGIRD, y su sala de crisis, para iniciar el Noveno Simulacro Nacional orientado a la autoprotección; desde allí, se recibieron las comunicaciones y afectaciones reportadas por los coordinadores municipales.
Para esta ocasión, el simulacro se adelantó de forma virtual y con ejercicios de simulación en mesa, a fin de poder evaluar, actualizar e implementar los planes de emergencia, municipales, familiares, empresariales y comunitarios, de tal forma que los nortesantandereanos comiencen a crear conciencia en las medidas de prevención necesarias para afrontar cada eventualidad.
La actividad contó con la participación de 38 municipios, 96 empresas públicas, 135 empresas privadas y 5 ONG comunitarias, y se trabajó sobre 5 planes comunitarios y 705 planes familiares, todo enfocado en el autocuidado para evitar el aumento de contagios de COVID-19.
Las administraciones municipales reportaron como principales afectaciones atender incendios, avenidas torrenciales, inundaciones, sismos y remoción en masa. De acuerdo con los resultados, en total, se evacuaron 12.009 personas, 355 personas resultaron heridas y 201 afectaciones se presentaron en el departamento.
“El ejercicio se adelantó con normalidad y activa participación por parte de las administraciones municipales y las diferentes empresas, esperamos desde la Consejería Departamental seguir fortaleciendo los planes de emergencia, los niveles y capacidades de respuesta en el departamento, así como los procesos de resiliencia en la comunidad”, afirmó Adriana Milena Arias Carrillo, consejera Departamental de Gestión del Riesgo de Desastres.
Por su parte, en la cúpula chata, el equipo de brigadistas de la Secretaría General, verificó las rutas de evacuación y los puntos de encuentro.
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