La rápida reacción que ha tenido la Gobernación, a través del Consejo Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres (CDGRD), al atender los municipios de Norte de Santander afectados por la ola invernal, ha permitido en una primera fase de respuesta llegar con más de 600 ayudas humanitarias de emergencia a Toledo, Chitagá, Labateca, Lourdes, Gramalote, La Esperanza y Salazar de Las Palmas.
La coordinadora del CDGRD, Adriana Milena Arias Carillo, informó que las intensas lluvias en Toledo han dejado un balance en el que se resaltan “derrumbes, movimientos de masas, distritos de riego afectados, el acueducto colapsado, 27 casas destruidas y 287 familias damnificadas. Se afectó el acueducto de los distritos de riego de las veredas La Camacha, El Molino, Hatos Alto y Hatos Bajo, dejando a 300 familias sin agua”.
En La Camacha, 11 familias tuvieron que abandonar sus viviendas por la remoción de tierra que se presentó la semana pasada.
La funcionaria señaló que la emergencia ha contado con la asesoría del CDGRD en la ejecución del Plan de Acción Específico, para que permita tener mejores herramientas en el manejo de la emergencia, y así, atender las necesidades de las familias damnificadas.
Por directrices del gobernador de Norte de Santander, William Villamizar Laguado, se continuará con el apoyo técnico con el banco de maquinaria, para seguir mejorando en el Plan de Acción Especifico en los municipios afectados por la lluvia.
La UNGRD, en coordinación con la Gobernación, estará apoyando a los municipios de Toledo, Labateca, Chitagá y La Esperanza en la parte técnica de la elaboración del Plan de Acción Específico y demás líneas que haya necesidad de activar frente a la emergencia, entre otras, las ayudas humanitarias, banco de materiales, de acuerdo a las solicitudes hechas al Consejo Departamental de Gestión del Riesgo.
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