INVERSIÓN DE LA GOBERNACIÓN HA MITIGADO EFECTOS DE LA CRISIS CAFETERA EN NORTE DE SANTANDER

A 4.000 millones de pesos, ascienden los recursos destinados por la Gobernación de Norte de Santander para la atención de 8.400 caficultores de 32 municipios del Departamento. 

Estos dineros serán destinados en la compra de fertilizantes y bolsas, adquisición de maquinaria, estudios de suelo, semillas, mano de obra y capacitaciones, con el fin de fortalecer la producción de las fincas cafeteras como empresas sostenibles en la región. 

A través del convenio que suscribieron la Administración Seccional y el Comité de Cafeteros, quienes aportaron 1.200 millones de pesos más, el pasado 8 de noviembre, se llegará a 5.000 hectáreas del cultivo, de los cuales 3 mil serán renovadas y se fertilizarán 2.272 hectáreas jóvenes, esto quiere decir, áreas sembradas entre 0 y 12 años, con una inversión del productor de solo el 50%. 

Según Gabriel Fernando González Sánchez, líder departamental de extensión rural del Comité de Cafeteros de Norte de Santander, el proyecto llegará a la mitad del total de los productores del grano, de los cuales 6.000 recibirán apoyos técnicos directos y 2.000 más se capacitarán en el programa de certificación y licenciamiento en comercialización de valor agregado. 

Esta iniciativa, que ya se empezó a ejecutar desde el pasado mes de febrero para los campesinos productores de café, ha sido un alivio para la crisis por la que estaba atravesando este sector, pues de boca de los mismos estaban cultivando a pérdida, debido al alto precio de los fertilizantes y los pocos ingresos que obtenían por la venta del grano. 

La destinación de los dineros para cada municipio, se ha hecho con base en el registro de caficultores en el Sistema de Información Cafetera (Sica), de tal forma que sea proporcional al número de área cultivada, lo que significa que entre más productores de café mayor es la inversión. 

El secretario de Desarrollo Económico, Wilmar Arévalo Sánchez, resaltó la oportuna ayuda que está llegando a los campesinos, teniendo en cuenta la difícil situación por la que atravesaron hace más de 1 año. 

“El pequeño cafetero tiene la posibilidad de ahorrar algunos costos, sobre todo para la fertilización y en maquinaria, lo que les permite convertir sus fincas en espacios de producción y competitividad,” añadió, Arévalo Sánchez. 

Se estima que a raíz de esta inversión que se pase de producir 12 millones de kilos de café a 18 millones, solo en la región, teniendo en cuenta, que se están dando las herramientas necesarias para mejorar sus cultivos. 

Actualmente, el 90% del café en el Departamento se exporta a países de Norteamérica, Europa y Asia; solo el 10% de la producción se destina para el consumo local y nacional. 

En estos momentos, con la puesta en marcha de estas acciones se puede decir que los caficultores de Norte de Santander se están preparando para poder escalar en la cadena de valor con programas de certificación y con producción de mejor calidad y modernización de maquinaria, generando mayores ingresos para sus familias y la economía municipal.