HAY QUE TRANSFORMAR EL CENTRALISMO, CON: DESCENTRALIZACIÒN Y REPRESENTATIVIDAD

Por: José Neira Rey 

1.- Tal como era previsible y porque el concepto de unidad y trabajo en equipo, requiere –tanto en el lado de Colombia como en el  de Venezuela – de una noción más práctica y realista, de lo que significa y representa  una Zona Fronteriza, lo que se viene asomando y pidiendo –sin una argumentación sustentada y probada con datos y referencias constatables o al menos presumibles –como soluciones, genera más preocupaciones y tensiones, que auténticas expectativas que beneficien a la colectividad y permitan a los empresarios, empleados y sociedad en general, enfrentar el grave momento que se está experimentando, ante los deseos de mando y de obrar acelerado, que han frenado y limitado acciones y perspectivas compartidas ,no solo sobre la línea divisoria de las aproximaciones fronterizas, sino en el ánimo y perspectivas, de quienes con otra mentalidad y otras alternativas, venimos anhelando la formulación de una trascendente política bilateral fronteriza, con un plan y una estrategia –igualmente dual y fraterna- que vincule, asocie y fortalezca la integración y vida en común que brota y fluye en la esencia de estas faja territoriales, sobre la base del respeto a lo institucional y democrático, la fraternidad compartida, tal como la trazaron nuestros visionarios libertadores y lo vienen  insinuando y explicando, quienes   proponen alternativas y vivencias de desarrollo ,más amplias y de proyección internacional ,así como correctivas e impulsoras de fuentes de trabajo, como es   : el establecimiento de Parques Industriales y Tecnológicos, Zonas Francas Especializadas y una Zona Aduanera Especial, en procura de aprovechar nuestros recursos, la importancia de nuestra ubicación geoestratégica, crear fuentes de trabajo ,irrumpir  con innovaciones e industrialización tarto a nivel nacional de los dos países, como en  lo internacional, en virtud del despertar que en el contexto de todo el Continente Americano, pareciera estar aflorando.  

Infortunadamente, el obrar apresurado centralista y el no pulsar, ni medir metodológicamente y con vehemencia, las opciones que pueden favorecer y grandemente a las dos Zonas, de los dos países, porque no se escucha lo que sus habitantes  ansían y vienen pidiendo y argumentando desde hace bastante años , los gobiernos  y los  connacionales de las grandes áreas y ciudades-más desarrolladas, no nos entienden y  nos dejan  bajo la tutela centralista, que sigue sin comprender ,que las fronteras necesitan atención y  un mejor  trato, porque es urgente  : una eficaz y orientadora descentralización administrativa, Incentivos, Estímulos, Mecanismos y Reglamentaciones que permitan engranar proyectos, capacitar a nuestras gentes, investigar en nuestras universidades y Centros Tecnológicos y  contando-siempre-, con la asistencia y ayuda presupuestal, de los dos gobiernos nacionales, para la atracción y consolidación de inversiones, en distintos frentes y actividades.

2.- Y, ¿Porque aludimos y buscamos la ayuda de los que tienen el poder? Pues, por eso, porque las fronteras son –hasta ahora -áreas marginales abandonadas, que no han sido comprendidas y valoradas cabal e integralmente, en virtud del dominio centralista y la menguada, cuando no pasiva y nula, convergencia hacia los sectores  externos y para que la periferia, también se integre y participe, en las gestiones y conductas que den  aliento y vigor, a la labor compartida. Un rápido observar de lo que hay y se mueve en  periferia nacional –de las dos naciones-, demuestra hasta la saciedad –y, no obstante representar las fronteras de Colombia, más  del 50%  TERRITIORIO NACIONAL-que en ellas –como también acontece en Venezuela- y, por el clamor y sentir de sus gentes.- lo que hay y predomina, es  :  abandono ,indiferencia y un letargo grave y decadente, que ojalá : pronto se modifique

3.- De ahí la favorabilidad de un cambio y transformación integradora y progresista, sana y limpia. Las fronteras, son las uniones y senderos  que conducen a validar, que el planeta, es la tierra de todos y no es, ni depende, de un grupo de naciones o de núcleos  poderosos, que aspiran a seguir dominando los grandes espacios -  incluidos los mares, desiertos, bosques e islas- gracias a   los avances prodigiosos de la ciencia y del hombre, en su afán, siempre de conquista.  

Las fronteras, son las fajas territoriales, en donde se escenifica y  diariamente se exhibe y  pone a prueba, todo lo que se ofrece o demanda en el planeta, teniendo por objeto de pago, las diferentes monedas y billetes en que se sustenta la complejidad financiera  y  tiene su origen y proyección : la banca, las operaciones  de préstamo y cambio, así como el afán de poder y dominio de grandes consorcios y poderosos recaudadores de los objetos y sistemas monetarios.