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Al leer hoy el editorial de La Opinion, pensé que no podemos quedarnos callados ante las palabras del Señor Editorialista que en su buen entender nos trasmite un mensaje dañino para nuestra conducta y moral, fundamentando su defensa por el Proyecto de Ospinas, en que si ya se construyeron y desarrollaron proyectos que afecten el medio ambiente debemos entonces continuar haciendo lo mismo y permitiendo que lo poco que no se ha destruido se destruya. La verdad que siento vergüenza por ese mensaje, o sea que si una mayoría se emborracha o matan eso es valedero para que todos hagamos lo mismo y entonces esta bien???... De pronto el Señor Editorialista no ha entendiendo que todo ha evolucionado y en esas épocas no había conciencia ambiental aun no conocíamos los ordenamientos territoriales o seguramente porque los ecos de los pocos ambientalistas no fueron fuertes o fueron opacados por editoriales o artículos manipulados que acallaron a la ciudadanía cucuteña y primaron los intereses económicos. Con el bosque popular es muy interesante que se investigue y averigüe como se otorgo la licencia que destruyo lo poco que quedaba del Bosque Popular y como fue el proceso pues si hubo oposición ¡! Lo que si es cierto es que ya no existía el Bosque lamentablemente este se había ido acabando y destruyendo por las intervenciones que se le hicieron a través de los años, pero este terreno según el POT del 2001 vigente para cuando se hizo, establecía esta área como protegida…pregunta se debería sancionar a quien expidió la licencia??? Porque obvio es imposible mandar a demoler ese “Polo de Desarrollo” como bien diría el editorialista.
Por eso digo que es importante que nos muestren ese estudio donde se determina que esa avenida pinar del rio debe ser un polo de desarrollo, pues en Cúcuta se confunden el desarrollo con parqueadero de taxis, vendedores ambulantes, ruido, busetas, trafico, congestion y desorden. Ah, y con locales de personas que no son de Cucuta, porque los pocos cucuteños que logran adquirir un local en esos centros comerciales todo el año estan desesperados por pagar condominios y administraciones y servicios esperanzados siempre en la época navideña.....
Con ese proyecto se perdería una zona donde aun se respira algo de aire, lugar donde el ruido desaparece para oir los cantares de los pájaros y animales silvestres que nos llevan al campo…por eso a los señores golfistas del Club Tennis les encanta estar allí. Bueno, y para terminar mi critica al Editorial de la Opinión, es importante que el señor editorialista investigue mas y entreviste a los viejos socios o personalidades de Cúcuta que si pueden decir cómo se adquirieron estos terrenos por el Club Tennis y si allí existían o no “laminas de agua”, charcos, brazos del rio pamplonita o humedales, que después de más de treinta años aun persisten obvio mantenidos por el Club Tennis pero que se han establecido como parte del medio ambiente y que permiten la existencia aun de una bella diversidad de aves, lagartos, iguanas y especies propias de los humedales y bosques. Los señores de Corponor también deben hacer memoria por sus conceptos y sus observaciones y objeciones tanto al POT del 2001 como al del 2011, porque en los diagnósticos del POT 2001 se dejo bien claro que esos terrenos debían protegerse ambientalmente, y en el Acuerdo 083 de 17 de enero de 2001, se determino su uso como Zona de servicios recreativos area de consolidación y parte del eje ambiental.
Fundacion Rio Urbano Cucuta
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