En cumplimiento de las instrucciones impartidas por el presidente Juan Manuel Santos para avanzar en la consecución de resultados contra las FARC, a fin de debilitar sus estructuras y contener las intenciones terroristas indiscriminadas contra la población civil, la Policía Nacional asestó dos importantes golpes que se suman a la captura del enfermero de alias “Alfonso Cano” en el departamento del Tolima.
Por una parte, unidades adscritas a la Dirección Antisecuestro y Antiextorsión, capturaron a nueve integrantes de la estructura de secuestros que manejaba Víctor Julio Suárez Rojas, alias “El Mono Jojoy”, y quienes de acuerdo con testimonios de liberados y rescatados, participaron activamente en la cruenta toma a Miraflores, Guaviare, ocurrida a comienzos de agosto de 1998, así como en la custodia de los plagiados.
Las detenciones se hicieron efectivas tras allanamientos simultáneos en Bogotá, Villavicencio, Neiva y Girón, Santander, donde fueron ubicados los protagonistas de la incursión que causó 19 muertos, decenas de heridos y 129 secuestrados, dos de los cuales (los sargentos del Ejército Róbinson Salcedo Guarín y Luis Alfredo Moreno), permanecen en cautiverio y cumplen 12 años en poder de los terroristas.
Los capturados, identificados como Campo Elías Galindo, alias “Foca”, Gildardo Forero García, alias “Arley”, Óscar Palomino Viáfara, alias “Óscar”, Rubén Gutiérrez Parra, alias “Alirio”, Faustino Díaz Riaño, alias “Rodrigo”, Albeiro Castrillón Laguado, alias “Euclides”, Gustavo García González, alias “Gonzalo”, Leonel Hernández Gutiérrez, alias “Úber” y Jaime Espitia Velásquez, alias “Rudas”, deberán responder por los delitos de secuestro extorsivo, terrorismo, homicidio agravado y rebelión.
Según los testimonios de varios secuestrados, además de participar de manera directa en el ataque a Miraflores, coordinaban las avanzadas para las caminatas de cambio de campamento, se encargaban de la custodia de los plagiados, transportaban los víveres hasta los sitios de cautiverio, y actuaban como “cadeneros”, es decir como los responsables de atar de cuellos, pies y manos a los militares y policías privados arbitrariamente de su libertad. Las investigaciones del GAULA los reconocen como subordinados de alias “Kokoriko”, “Enrique Gafas” y el mismo “Mono Jojoy”.
La ofensiva policial contra las FARC se extendió a la vereda San José de Los Pinos, del municipio de La Victoria, en el departamento de Nariño, donde fue desmantelado el campamento madre de Líberman Imbachi, alias “Norbey”, segundo cabecilla de la estructura, quien el año pasado fue enviado por “Joaquín Gómez” para acrecentar la presencia terrorista en esa zona del país.
Por una parte, unidades adscritas a la Dirección Antisecuestro y Antiextorsión, capturaron a nueve integrantes de la estructura de secuestros que manejaba Víctor Julio Suárez Rojas, alias “El Mono Jojoy”, y quienes de acuerdo con testimonios de liberados y rescatados, participaron activamente en la cruenta toma a Miraflores, Guaviare, ocurrida a comienzos de agosto de 1998, así como en la custodia de los plagiados.
Las detenciones se hicieron efectivas tras allanamientos simultáneos en Bogotá, Villavicencio, Neiva y Girón, Santander, donde fueron ubicados los protagonistas de la incursión que causó 19 muertos, decenas de heridos y 129 secuestrados, dos de los cuales (los sargentos del Ejército Róbinson Salcedo Guarín y Luis Alfredo Moreno), permanecen en cautiverio y cumplen 12 años en poder de los terroristas.
Los capturados, identificados como Campo Elías Galindo, alias “Foca”, Gildardo Forero García, alias “Arley”, Óscar Palomino Viáfara, alias “Óscar”, Rubén Gutiérrez Parra, alias “Alirio”, Faustino Díaz Riaño, alias “Rodrigo”, Albeiro Castrillón Laguado, alias “Euclides”, Gustavo García González, alias “Gonzalo”, Leonel Hernández Gutiérrez, alias “Úber” y Jaime Espitia Velásquez, alias “Rudas”, deberán responder por los delitos de secuestro extorsivo, terrorismo, homicidio agravado y rebelión.
Según los testimonios de varios secuestrados, además de participar de manera directa en el ataque a Miraflores, coordinaban las avanzadas para las caminatas de cambio de campamento, se encargaban de la custodia de los plagiados, transportaban los víveres hasta los sitios de cautiverio, y actuaban como “cadeneros”, es decir como los responsables de atar de cuellos, pies y manos a los militares y policías privados arbitrariamente de su libertad. Las investigaciones del GAULA los reconocen como subordinados de alias “Kokoriko”, “Enrique Gafas” y el mismo “Mono Jojoy”.
La ofensiva policial contra las FARC se extendió a la vereda San José de Los Pinos, del municipio de La Victoria, en el departamento de Nariño, donde fue desmantelado el campamento madre de Líberman Imbachi, alias “Norbey”, segundo cabecilla de la estructura, quien el año pasado fue enviado por “Joaquín Gómez” para acrecentar la presencia terrorista en esa zona del país.
No hay comentarios:
Publicar un comentario