Chavistas buscan votos en la frontera

En Cúcuta los afiches de un Hugo Chávez muy repuesto, con pelo tupido y una carcajada sorda aparecen de repente colgados de una camioneta de estacas o en alguna que otra fachada de una casa. 'Presidente 2012, Chávez, Corazón de mi patria' es el mensaje. Así lo reseña eltiempo.com.

De estos tiene varios Ramón Támara, un hombre bajo, de bigote prominente y de camisa al aire. Se dirige a su desvencijado Renault del año 77, color vino tinto, como debe ser, y saca de su baúl unos cuantos afiches. Paso seguido, y sin preguntarlo, saca de su 'paquete revolucionario' una bandera roja con el símbolo del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y abajo se lee Ureña en letras blancas. Se refiere a un municipio venezolano tan cerca de Cúcuta que parece ser un apéndice de ella.

Támara es colombiano, nortesantandereano, nacido en Bucarasica, que lleva las banderas de Chávez siempre listas para ondearlas, sea en la plaza pública o tomando un café. Él pasó de ser profesor de escuela en el Catatumbo a ser uno de los líderes del Frente Popular, militante del extinto Partido Socialdemócrata, líder sindical de la Central Unitaria de Trabajadores y últimamente hizo parte del Polo Democrático, con el que llegó a ser diputado del departamento (2007-2011), y a cuyo partido renunció a finales del año pasado porque "a la izquierda colombiana no le gusta comprometerse con el socialismo".

Hoy, el exdiputado tiene un contrato con la administración del alcalde de Cúcuta, Donamaris Ramírez, quien lo llevó a su administración para que lo asesorara en temas fronterizos. Pero últimamente Támara tiene otra tarea, liderar el movimiento Colombianos con Chávez, para lo cual espera revivir la oficina que tenía en el centro de Cúcuta y la cual, según él, tuvo que cerrar hace unos años por problemas de seguridad. "En este país (Colombia) somos libres de crear movimientos, nada me lo prohíbe", dice.